FSIE Andalucía, sindicato mayoritario entre los profesionales de los centros educativos privados y concertados de nuestra Comunidad Autónoma, ante el agravamiento de la incidencia de la pandemia de COVID en el territorio andaluz durante el mes de enero hace las siguientes CONSIDERACIONES:
1.- La situación actual sanitaria en los centros educativos andaluces no es más grave aún gracias a la disciplina y el esfuerzo de los profesionales, docentes y no docentes, que desarrollan su labor en los mismos, con unos recursos humanos proporcionados por la Consejería que, aunque extraordinarios para combatir la pandemia, son claramente insuficientes, ya que no hacen posible el desdoble de grupos para lograr una ratio que permita la distancia social adecuada para prevenir el contagio, y sin la dotación adecuada de dispositivos de purificación del aire que complementen las medidas de ventilación de los espacios, a pesar de las reiteradas peticiones que ha cursado FSIE y que han sido ignoradas por todas las Administraciones autonómicas y locales.
2.- En el caso de que las autoridades competentes, educativas y sanitarias, decidieran la suspensión de las clases presenciales en localidades concretas o en la generalidad de la Comunidad Autónoma, FSIE Andalucía recuerda que deben tomarse medidas urgentes para solucionar los graves problemas que padeció el Sistema Educativo Andaluz durante el último trimestre del curso pasado en el que sufrimos el confinamiento domiciliario: brecha digital que provocó que un gran número de alumnos andaluces no pudieran tener acceso a la enseñanza a distancia, sobrecarga laboral de los docentes que estuvieron sometidos a jornadas interminables llevadas a cabo por sus propios medios, pedagógicos y digitales y empeoramiento de las condiciones laborales de parte del personal no docente de los centros educativos (de servicios complementarios y extraescolares) que sufrió el efecto de numerosos ERTES.
3.- Reiteramos nuestra petición, cursada al Consejero de Educación y Salud, de que se priorice al colectivo de trabajadores, docentes y no docentes, de los centros educativos, en el proceso de vacunación y se haga con celeridad, ya que es la única manera de preservar la salud de los mismos y de contribuir a que los centros educativos andaluces sigan siendo un entorno seguro, incluso en situaciones tan complejas como la que estamos viviendo y que se tomen las medidas necesarias para que, en el caso de seguir llevando a cabo el proceso educativo de forma presencial en las aulas, se puedan implantar mayores medidas preventivas, como el distanciamiento social mediante la reducción radical de la ratio, la mejora de la dotación de Equipos de Protección Individual y la instalación de sistemas que ayuden a la tan necesaria purificación del aire en los centros escolares.